En la localidad de Villa Jaragua, provincia Bahoruco, se expresa un profundo pesar por la pérdida de Jonatan Méndez, cuya partida ha dejado una huella significativa entre familiares, amistades y personas cercanas. La comunidad lo recuerda como una figura querida y respetada, cuya presencia marcó la vida de muchos.
Augusto G. Rivas fue uno de los primeros en compartir unas palabras cargadas de afecto y sinceridad: “Todos te queríamos, Gordo, y tú lo sabías. En una ocasión escribiste: ‘Ven y dímelo en mi cara que no me quiere que no me ama hipócrita, no te atreves a venir,’ palabras que reflejan tu autenticidad y la conexión sincera que tenías con quienes te rodeaban.” Esta cita, compartida por Méndez en vida, ha resonado entre quienes lo conocieron por su carácter franco y cercano.
Otoniel Sen también ofreció un emotivo mensaje, recordando a Jonatan como un amigo entrañable: “No es fácil decir adiós cuando se ha compartido tanto. Gracias por tu amistad sincera, por los momentos vividos y por estar siempre presente. Te vas físicamente, pero aquí quedas, en cada recuerdo, en cada risa compartida, en cada consejo. Que el camino que elijas te lleve siempre hacia lo mejor. Esta no es una despedida, es un ‘hasta pronto’.” Su testimonio ilustra la profundidad de los lazos construidos con Méndez a lo largo del tiempo.
Por su parte, Fernando González expresó su pesar al mencionar las dificultades enfrentadas por Jonatan y cómo su búsqueda de respaldo no fue escuchada: “Se cansó el pobre Jonatan Méndez de pedir ayuda a estos políticos de mierda que tenemos en esta provincia que solo piensan en ellos y en beneficiar a su familia. El pobre pidiendo ayuda y otros tomándolo hasta de burla mientras él batallaba por su vida.” Las palabras de Fernando reflejan la frustración ante la indiferencia que rodeó la situación de Méndez durante momentos difíciles.
Los mensajes compartidos por quienes lo conocieron son testimonio del impacto que Jonatan dejó en su entorno. Amigos, conocidos y familiares lamentan su partida y destacan su lucha, su autenticidad y su forma de relacionarse con sinceridad y afecto.
Las muestras de afecto y palabras de despedida se han multiplicado, y entre ellas se reitera un mismo sentir: el deseo de que Jonatan sea recordado con respeto, cariño y gratitud. Su recuerdo permanece entre quienes compartieron momentos y vivencias junto a él.