El caso de Winson Polanco Durán, quien actualmente cumple una condena de 30 años en la penitenciaría de Rafey Hombre, ha suscitado una serie de interrogantes y preocupaciones en torno a la justicia y la imparcialidad del sistema legal.
Polanco Durán afirma ser el único individuo sentenciado y encarcelado por un incendio ocurrido en el barrio Las Flores, Arroyo Hondo, a pesar de que otros presuntos implicados no han sido investigados ni procesados.
En un llamado a la Procuraduría General de la República, Polanco Durán solicita una revisión exhaustiva de su caso, implorando a figuras como Miriam Germán y Jenny Berenice que intervengan para esclarecer la verdad.
El acusado alega contar con pruebas contundentes que respaldan su inocencia, incluyendo testimonios de testigos que señalan a otros individuos como los verdaderos responsables, así como evidencia de intentos de soborno por parte de la propietaria de la vivienda incendiada, la señora Paula Rodríguez.
Polanco Durán insiste en su inocencia, destacando que en el momento del incidente no se encontraba en el lugar de los hechos. Su llamado a la justicia es claro: pide una investigación exhaustiva que incluya a todos los implicados en el expediente y que se emitan órdenes de arresto para aquellos que sean responsables.
Este caso plantea serias interrogantes sobre la equidad y la eficacia del sistema judicial, así como sobre la importancia de garantizar un debido proceso y la presunción de inocencia para todos los acusados. La petición de Polanco Durán por una revisión justa y completa de su caso subraya la necesidad de un sistema legal que esté verdaderamente comprometido con la búsqueda de la verdad y la impartición imparcial de la justicia.
