La angustia y la desesperación se apoderaron del sector San Miguel en el municipio de Azua, donde se reporta la desaparición de una niña de apenas 2 años, quien fue arrastrada por las corrientes del río Irabon la noche de ayer.
La comunidad, unida en su dolor, ha movilizado esfuerzos para encontrar a la pequeña, cuya vida se encuentra en peligro tras este trágico suceso.
Según informó Rafael de la Red Nacional de Comunicadores Dominicanos (RNCD), brigadas de la Defensa Civil, junto con vecinos de la zona, se han volcado en la búsqueda desde el momento en que se conoció el accidente.
Hasta ahora, los esfuerzos han dado como resultado el hallazgo de una toalla, la misma en la que la niña estaba envuelta cuando, lamentablemente, cayó al río. Este descubrimiento, aunque escaso, ha intensificado la preocupación y la determinación de quienes participan en la búsqueda.
Cary Beltré, la madre de la niña, enfrenta una situación desgarradora mientras espera noticias sobre el paradero de su hija. Los miembros de la brigada y los residentes locales trabajan sin descanso, conscientes de la urgencia y la gravedad de la situación.
La comunidad entera de San Miguel se encuentra en vilo, con la esperanza de un desenlace positivo en medio de este trágico incidente.
Las autoridades continúan colaborando estrechamente con los vecinos para cubrir la mayor área posible a lo largo del río Irabon.
La solidaridad y el apoyo de la comunidad son palpables, y todos los esfuerzos están concentrados en encontrar a la pequeña, con la esperanza de que sea rescatada a salvo.