Los niños que profanaron y prendieron fuego a varios mobiliarios y libros en la parroquia Nuestra Señora de La Milagrosa en el distrito municipal de Maimón apenas cuentan con edades entre seis y nueve años.
En las investigaciones hechas por el Ministerio Público de este distrito judicial se establece que en el grupo hay un niño de seis años, dos de ocho y uno de nueve, por lo que no son imputables y serán los padres de éstos quienes deberán responder en materia civil.
Además, tanto los niños como los progenitores deberán ser sometidos a tratamientos psicológicos.
La denuncia hecha por el sacerdote Tony Bonilla, cura párroco del lugar, indica que durante el hecho registrado el pasado domingo, los menores destruyeron el púlpito junto a varios arreglos florales que estaban colocados al pie de la imagen de la virgen.