En un hecho que conmocionó a la ciudad de Guayaquil, un grupo de delincuentes armados irrumpió en las instalaciones del canal TC Televisión durante una transmisión en vivo. Los espectadores presenciaron el crimen a través de una pantalla que mostraba a hombres enmascarados secuestrando a miembros de los medios de comunicación.
Autoridades de la Policía Nacional informaron que unidades especializadas se desplegaron en el lugar para atender la emergencia. Durante el ataque, periodistas y fotógrafos solicitaron ayuda a través de un chat grupal con la Policía Nacional y el servicio integrado de seguridad ECU 911, informaron medios locales.
En un momento de extrema tensión, el periodista José Luis Calderón, con un arma apuntándole y un cartucho de dinamita en el bolsillo, se arrodilló y suplicó que no le hicieran daño. Por el momento, no está claro si alguien resultó herido o murió.
La Secretaría de Comunicación del Gobierno informó que unidades especializadas ingresaron al canal en respuesta al incidente. Durante la transmisión, se escuchó a los delincuentes exigiendo la retirada de la Policía del lugar.
En una respuesta gubernamental, el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, emitió un decreto reconociendo la existencia de un “conflicto armado interno” en el país. Este decreto se suma a las medidas tomadas en las últimas 24 horas, que incluyen un estado de excepción y toque de queda en todo el territorio nacional.
La situación ha generado gran preocupación, especialmente después de otros actos violentos, incluyendo el secuestro de policías en distintas localidades y ataques en varias provincias del país. La comunidad permanece atenta a los desarrollos de esta situación en constante evolución.
