El martes 30 de mayo, miembros de la comunidad en el barrio Inwood de Manhattan en la ciudad de Nueva York fueron sorprendidos por un horrible crimen contra un dominicano llamado Máximo Polanco. Resultó que el hombre murió a manos de su pareja de hecho.
“Maximito”, como era conocido en la comunidad, fue víctima de varios puñetazos en la espalda por parte del sujeto, por motivos que se desconocen. Sin embargo, se determinó que el atacante supuestamente sufría de un trastorno mental.
Tras cometer el crimen, el agresor se dio a la fuga de inmediato, pero los compinches de la zona han sido detenidos. Según familiares del occiso, se entiende que el delincuente tenía un largo historial de comportamiento violento y agresivo.
Un trabajador y vecino del edificio, identificado como Ángel Polanco, afirmó haber visto el momento exacto del ataque en las cámaras de seguridad y huyó de inmediato, dejando su trabajo para alcanzar al atacante en el portón del edificio.
Los familiares del occiso aseguraron que este había denunciado en repetidas ocasiones a las autoridades la violencia del agresor, pero nunca les respondieron, por lo que no pudieron desalojarlo del inmueble. De hecho, en una llamada a los oficiales, le advirtieron que sería arrestado si no abría la puerta.
Maximito dejó tres niños que quedaron huérfanos en República Dominicana, donde aún viven. Su exesposa, Noemí de la Cruz, describió a la víctima como una persona tranquila que no tenía problemas con nadie, una persona amable, ejemplar y trabajadora.
Sus familiares, por otro lado, están buscando ayuda de la comunidad para pagar el funeral del gato ya que no tienen medios económicos y, a su vez, exigen justicia a las autoridades en este caso.