En un caso que ha conmocionado a la comunidad, un joven lloró de impotencia al esperar información sobre su esposa en el Seguro Social de Santiago. El hombre, visiblemente angustiado, no recibió ninguna respuesta de los empleados del centro, a pesar de su desesperada búsqueda de información sobre el estado de salud de su esposa.
El joven, quien se encontraba en un estado de gran preocupación, expresó que, si algo le ocurriera a su esposa, el único responsable sería el Seguro Social. Recientemente, le han informado que a la fémina, cuya vida está corriendo riesgo, le están suministrando un medicamento para aumentar las contracciones.