En un lamentable incidente en San Francisco de Macorís, Doña Nuri Agustina, de 90 años, denunció haber sido agredida físicamente por un pastor evangélico durante un conflicto de demarcación de tierras. Visiblemente conmocionada, la mujer de 90 años compartió su experiencia y describió cómo el supuesto religioso la agarró con fuerza del brazo, dejándole visibles moretones.
Un vídeo que circula en línea que documenta la violencia muestra a varios vecinos interviniendo para separar al sacerdote de la mujer, mientras el sacerdote le habla en voz alta y la sostiene, lo que a menudo describen como «sacudirla».
Doña Nuri exige justicia por el comportamiento, que la comunidad califica de abusivo, advirtiendo que podría agravarse si no se toman las medidas adecuadas.
