SANTO DOMINGO.– Deyanira A. Sosa Tejeda rindió un emotivo homenaje a su hija Melissa Yismel Tejada Sosa con motivo de su cumpleaños, el primero desde que ya no está presente físicamente.
La joven formó parte del grupo de personas que dejaron de vivir tras el colapso del techo en la discoteca Jet Set.
En medio del recuerdo y la emotividad, Deyanira compartió un mensaje cargado de sentimientos en sus redes sociales, donde expresó con palabras conmovedoras el profundo lazo que las unía.
En su dedicatoria, resaltó el amor, la fe y la gratitud con las que eligió conmemorar la vida de su hija, nacida el mismo día que ella.
“Hoy celebramos juntas… aunque de una forma distinta. El primer cumpleaños sin tu abrazo, pero con tu amor más presente que nunca”, escribió Deyanira en su mensaje, mostrando cómo, pese a la ausencia física, el vínculo madre e hija sigue vigente en su vida cotidiana.
En su publicación, destacó que ambas nacieron el mismo día, una coincidencia que describió como una bendición divina y uno de los mayores regalos que ha recibido.
A través de palabras simbólicas, explicó cómo percibe la esencia de su hija en pequeños detalles de la vida diaria.
“Aunque ya no estés, tu esencia florece en mí. En cada flor, en cada suspiro, en cada rayo de sol… estás tú”, expresó, describiendo la forma en que siente la presencia de Melissa en su entorno.
Deyanira también hizo énfasis en la importancia de recordar a su hija desde el amor y la gratitud. Sostuvo que el amor verdadero no conoce despedidas, y que el legado de ternura y luz que dejó Melissa continúa vivo en su memoria.

“Contigo aprendí a recibir ese amor que viene de Dios y a sentirlo. Aprendí a ser madre dando lo mejor de mí”, añadió, reflejando el impacto profundo que tuvo la maternidad en su vida y el aprendizaje que le dejó su hija.
Melissa Yismel Tejada Sosa habría cumplido 27 años el 3 de julio. Su madre eligió recordar esta fecha especial mediante un homenaje íntimo, lleno de flores, palabras sentidas y un profundo sentido de conexión espiritual, reafirmando su decisión de honrar su vida con esperanza y amor duradero.