SANTO DOMINGO. – A tres décadas de la adopción de la Plataforma de Acción de Beijing (1995), República Dominicana ha logrado avances significativos en materia de igualdad de género. Sin embargo, todavía enfrenta retos estructurales en áreas clave como la pobreza, la violencia de género, la participación política y el acceso a la salud y la educación.
Así lo revela el informe “Avances y Desafíos de República Dominicana en la Implementación de la Plataforma de Acción de Beijing”. Este informe ha sido elaborado por el Centro de Estudios de Género del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (CEG-INTEC). Fue presentado en el marco del Día Internacional de la Mujer.
El estudio analiza los progresos y obstáculos en las 12 áreas críticas establecidas en la Plataforma de Beijing. Si bien se han implementado leyes, políticas públicas e iniciativas para reducir las brechas de género, persisten problemas estructurales que afectan la calidad de vida de las mujeres. Especialmente aquellas en situación de vulnerabilidad.
Logros y desafíos persistentes
El documento fue presentado por Desiree del Rosario, coordinadora del CEG, y Dalul Ordehi, decana del Área de Ciencias Sociales y Humanidades del INTEC. Este documento destaca los avances logrados en la adopción de marcos legales y programas sociales en favor de la equidad de género. Entre los logros se encuentran la creación del Ministerio de la Mujer y la implementación de leyes contra la violencia de género. Además, se ha adoptado cuotas de género para fortalecer la participación política femenina.
No obstante, la desigualdad de género sigue siendo un desafío latente. “Las mujeres enfrentan barreras significativas en el acceso a empleos dignos, participación política, salud sexual y reproductiva, y erradicación de la violencia de género. Además, las mujeres rurales, migrantes y niñas son particularmente vulnerables a la exclusión social”, sostuvo Del Rosario.
En el aspecto económico, las mujeres continúan siendo las más afectadas por la pobreza. La tasa es del 20.1% en hogares con jefatura femenina, frente al 17.8% en hogares dirigidos por hombres. La brecha salarial se mantiene en un 18%. El 49.4% de las mujeres trabaja en el sector informal, sin acceso a seguridad social, en empleos como ventas ambulantes, trabajo doméstico y agricultura de subsistencia.
Violencia de género y salud sexual y reproductiva
En 2023, se registraron 137 muertes violentas de mujeres en el país, lo que evidencia problemas críticos como la impunidad y la falta de recursos para atender a las víctimas. Entre 2019 y 2023, al menos 730 mujeres murieron en condiciones de violencia. Esto sitúa a República Dominicana como el quinto país con la tasa más alta de feminicidios en América Latina y el Caribe (2.4 por cada 100,000 mujeres).
En cuanto a salud sexual y reproductiva, el país mantiene una de las tasas más altas de embarazo adolescente en la región, con 77 nacimientos por cada 1,000 adolescentes entre 15 y 19 años. Además, en 2023 la mortalidad materna aumentó a 129 muertes por cada 100,000 nacidos vivos. “La legislación dominicana penaliza el aborto en todas las circunstancias, lo que ha llevado a un aumento de abortos clandestinos e inseguros, con un estimado de 25,000 casos anuales”, señala el informe.
Participación política y educación
En términos de participación política, la representación femenina ha mejorado en la Cámara de Diputados. Las mujeres ocupan el 36.8% de los escaños para el período 2024-2028. Sin embargo, en el Senado y las alcaldías, la presencia femenina sigue siendo baja, con solo un 12.5% y un 10%, respectivamente.
En educación, aunque la tasa de alfabetización femenina ha mejorado y se ha alcanzado la paridad de género en la matrícula escolar en los niveles primario y secundario, la deserción escolar sigue afectando a muchas niñas. Especialmente en zonas rurales y entre adolescentes embarazadas.
Recomendaciones para el futuro
El informe de INTEC propone diversas medidas para acelerar los avances en igualdad de género, entre ellas:
- Aumento del presupuesto para políticas de género y fortalecimiento de la coordinación interinstitucional.
- Reformas legales para garantizar el acceso a la salud sexual y reproductiva, incluyendo la despenalización del aborto en casos de violación, incesto o riesgo para la vida de la madre.
- Estrategias para reducir la pobreza y la desigualdad económica, asegurando mayor acceso de las mujeres a créditos, empleo formal y seguridad social.
- Medidas para erradicar la violencia de género, incluyendo más casas de acogida y mejor acceso a la justicia para las víctimas.
- Programas de educación en igualdad de género dirigidos a estudiantes y medios de comunicación. Estos programas buscan cambiar estereotipos y fomentar una representación equitativa de las mujeres en la sociedad.
Un llamado a la acción
El informe concluye que, aunque República Dominicana ha avanzado en el cumplimiento de sus compromisos con la Plataforma de Beijing, aún queda un largo camino por recorrer. “La igualdad de género no es solo un derecho fundamental, sino una condición indispensable para el desarrollo sostenible del país. Es necesario un esfuerzo coordinado entre el gobierno, la sociedad civil, el sector privado y la academia para cerrar las brechas que persisten”, destaca el estudio.
Con información de Noticias SIN