Los residentes de la provincia de Azua quedaron conmocionados después de que una niña de un año muriera el martes mientras era atendida en el departamento de emergencias pediátricas del hospital taiwanés de la región.
Según información obtenida por medios locales, la pequeña inocentemente se metió un grano de frijol en la nariz mientras su madre estaba amamantando. Debido a un pequeño descuido, la bebé realizó un acto que resultó en asfixia y muerte instantánea, dejando a sus seres queridos en un profundo dolor.
Los familiares del fallecido son del Área de Proyecto 4 de la ciudad de Azua. El cuerpo de la pequeña ha sido enviado al Instituto Nacional de Medicina Legal (INACIF) para efectos legales para confirmar que la causa de la muerte fue por asfixia.