En una emotiva ceremonia, familiares, amigos y seres queridos se reunieron para despedir a la joven Carla Rodríguez, cuya vida quedó trágicamente truncada en un accidente vial que ahora es tratado como un homicidio.
El funeral se celebró en el cementerio municipal de la ciudad, donde una multitud se reunió para darle el último adiós y darle la bienvenida al Año Nuevo a la joven de 33 años, que llegó a República Dominicana procedente de Estados Unidos hace ocho días.
Carla murió de manera impactante al ser atropellada por un auto en la avenida Gregorio Rivas y arrastrada por aproximadamente un kilómetro. La brutalidad del incidente dejó su cuerpo irreconocible y sus familiares decidieron congelarlo hasta que llegara su padre al funeral.
Cristian, el padre adoptivo de Carla, instó a las autoridades a profundizar en la investigación del conductor involucrado en el trágico incidente. Exigió que el caso no se catalogara únicamente como un accidente de tránsito, sino como un acto criminal que merece justicia.
Dirigiéndose al general de la Policía, Rufino Contreras, Cristian expresó su determinación de no descansar hasta que se haga justicia para su hija. A pesar de no tener detalles precisos del incidente debido a su ubicación en Estados Unidos, Cristian tomó un vuelo de emergencia para estar presente en el funeral y asegurarse de que se haga justicia.
Mientras la comunidad se despide de Carla, el conductor del vehículo, Norberto Rosario, conocido como “El Perro Flaco“, se encuentra bajo arresto y enfrentará las autoridades para determinar su responsabilidad en este trágico suceso.
