Un grupo de vecinos acusó a un adolescente de abusar sin descanso de su feliz madre Mariela y de causarle múltiples lesiones.
La denunciante explicó que el joven sufría de epilepsia, por lo que sus circunstancias particulares lo hacían aún más peligroso en las condiciones que mantenía su madre.
Hasta el momento, la madre solo ha sido identificada como Marilla Feliz, residente de Enriquillo, provincia de Barahona.