En la tranquila comunidad de Manabao, en Jarabacoa, la desaparición de Roldany Calderón, un niño originario de Jarabacoa, ha sumido a la zona en un enigma que ha provocado numerosas especulaciones.
El pequeño, de tan solo unos años, fue reportado como desaparecido el pasado fin de semana, mientras caminaba junto a su familia por un sendero hacia la zona de Los Tablones.
Desde entonces, diversas teorías han surgido, algunas más inquietantes que otras, y una de ellas menciona la posible relación con prácticas de brujería.
En un programa de radio titulado “Echando el Pulso”, conducido por Johnny Vásquez, se discutió una de las hipótesis más llamativas: que la desaparición del niño podría estar vinculada con rituales ocultistas en la zona, particularmente en los alrededores del Parque José Armando Bermúdez.
Se especula sobre la existencia de una iglesia con orientación espiritual desconocida entre la Ciénaga y los Bermúdez de Constanza, un área remota y sin acceso vehicular o cobertura telefónica.
La desaparición de Roldany ha desconcertado a la comunidad. Según los testimonios de familiares y residentes locales, todo ocurrió en cuestión de segundos.
El niño, que se encontraba con su familia, desapareció sin dejar rastro mientras caminaban por el sendero.
A pesar de las diversas versiones, no se ha encontrado evidencia física que indique que el niño haya caído al río cercano, el Yaque del Norte, cuyo caudal no es lo suficientemente fuerte como para arrastrar a una persona sin dejar huellas visibles.
Las autoridades continúan con la búsqueda del niño, con más de diez instituciones movilizadas, incluyendo la Policía Nacional, el Ministerio Público, la Defensa Civil y el COE. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos, no se han encontrado pistas claras.
Además, se ha hablado de un video clave que podría mostrar al niño por última vez, entregado por una mujer que asegura haberlo grabado en el momento de su desaparición.
El padre del niño, según comentarios, ha dado varias versiones sobre los hechos, lo que ha generado sospechas entre las autoridades.
Esto ha llevado a que se profundicen en la investigación dentro del círculo cercano del menor.
Incluso, se han mencionado otros casos similares de desapariciones en la misma área en los últimos tres años, lo que ha aumentado la preocupación de la comunidad y ha provocado llamados a cerrar caminos secundarios de acceso al parque nacional, que, según denuncias, son utilizados para ingresar vehículos y motocicletas de manera irregular.
La comunidad de Manabao, profundamente conmovida por el suceso, espera respuestas, mientras las autoridades continúan investigando todas las teorías posibles.
Las sospechas sobre la implicación de una tercera persona, que podría haber aprovechado uno de estos accesos poco vigilados para sustraer al niño, también están siendo investigadas.
La población se mantiene en vilo, con la esperanza de que la situación se resuelva pronto y el niño sea encontrado sano y salvo.