Redacción. Desde demencia hasta cáncer puede provocar el uso de tampones durante el periodo menstrual de la mujer, debido al alto contenido de sustancias toxicas que estos sujetan según un nuevo estudio.
Según los expertos, una persona que menstrúa en promedio pasará alrededor de cinco años de su vida reproductiva total usando aproximadamente 11 MIL tampones, toallas sanitarias, protectores diarios y otros productos menstruales.
¿Qué pasa si algunos de esos productos para la menstruación contienen metales pesados o sustancias químicas potencialmente tóxicas vinculadas a ciertas enfermedades?
Este es el caso de los tampones según ha revelado una investigación de la Universidad de Berkeley, que asegura estos contienen plomo, arsénico y sustancias químicas potencialmente toxicas, asociados a enfermedades como demencia, infertilidad, diabetes y cáncer.
Otras de las consecuencias del uso de tampones incluyen:
-Mal olor
-Bacterias en la vagina
-Infecciones vaginales
-Sequedad vaginal
Los fabricantes de tampones y la FDA recomiendan que no se usen de noche o durante más de ocho horas por un mayor riesgo de síndrome de shock tóxico, una infección bacteriana mortal que puede causar insuficiencia orgánica y que podría ser mortal si no se trata.