Nos ha llegado un caso de la esperada salida física de un niño de 7 años que falleció el pasado miércoles después de que él y su madre fueran al centro de salud para una operación «sencilla».
La menor respondía al nombre de Ángel Janeler Rodríguez, quien este viernes cumple 8 años. Estaba siendo operado de adenoides en un centro de salud de Punta Cana, provincia La Altagracia.
En un día trágico, los informes oficiales confirmaron que el niño había llegado al centro de salud a las 6:00 am. por la mañana. Allí fue recibido por un pediatra y derivado al área correspondiente, donde será atendido por un pediatra que certifique que se encuentra en “buenas condiciones físicas”.
todo es normal. El niño llevaba cuatro horas en el quirófano, y el personal médico salía de vez en cuando a dar la triste noticia del fallecimiento de Ángel.
El portavoz de Emergencias explicó que el joven había sufrido un «infarto», y ya podemos imaginarnos cómo se sintió Ine Rodríguez García -su madre- en ese momento.
El bebé es descrito como una persona muy positiva, risueña y llena de fantasías, que según su madre aspira a convertirse en uno de los mejores futbolistas del mundo y darle un futuro brillante a su madre.
Los restos de Ángel fueron trasladados al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) en el Cementerio Cristo Redentor de Santo Domingo, donde se realizaron las diligencias correspondientes. Sus familiares, en cambio, no pudieron contener el dolor mientras esperaban el entierro del cuerpo.
Una noticia que nos llena de tristeza. Que los recuerdos del amor traigan paz, consuelo y fortaleza a los dolientes.