Virgilio Ureña García, cuidador del Cementerio Cristo Salvador, llamó este jueves al albañil Hilario Pascual, mejor conocido como «Grillo»), que se entregó a las autoridades luego de que dejó a seis recién nacidos en las afueras del cementerio, donde debían ser enterrados. . fue enterrado.
«Estoy hablando con la asociación de albañiles (Christo Salvador) a la que él (Grillo) pertenece para que se encarguen de entregarlo. Esto es lo mejor que puede hacer: entregarse y hablar de Ureni con las autoridades», dijo Ya García. en entrevista con «LISTÍN DIARIO».
«Grillo», quien trabajaba en la funeraria «La Popular», violó las normas de registro (que registran los albañiles cuando entierran un cuerpo), para evadir impuestos por mil 400 pesos, según impresión de la dirección.
«Esta vez el acuerdo fue completamente violado», dijo Ureña García.
Los administradores mostraron ante la cámara documentos oficiales del cementerio, que mostraban registros de algunos hospitales del país transportando cadáveres, amputados, recién nacidos o extraños (personas pobres) a los cementerios a través de funerarias.
Cristian Mambrú, secretario general de la masonería salvadoreña, también instó a «Grillo» a entregarse a las autoridades para que «explique por qué aceptó que le entregaran estos cuerpos y por qué los abandonó».
El secretario general también afirmó que la funeraria y su conductor eran «tan culpables como el camarada Grillo».
Ureña García dijo que los seis recién nacidos encontrados eran del Hospital Juan Bos de Santo Domingo del Este, que nunca llevó los cuerpos al cementerio para su sepultura.
«Hay un clip de audio donde se dice que él (Grillo) le dijo a la funeraria (el conductor) que dejara al bebé allí, lo que quiere decir que indica que él (Grillo) no estaba en el cementerio cuando trajeron a estos recién nacidos. «Vinieron de No llegaron a la oficina», dijo el administrador.
«¿Dónde están esos papeles de los recién nacidos? Estoy seguro que el hospital se los dio a la funeraria, y la funeraria debía entregárselos a la oficina, ya fuera Grillo o alguien más, y luego se los entregamos a la funeraria». «Son cristiana sepultura», añadió.